Las iglesias católica y evangélica acudieron ayer por ante la Cámara de Diputados para manifestar su oposición al manual “Hablemos de educación para jóvenes”, que promueve la Asociación Pro Bienestar de la Familia (PROFAMILIA).
El empresario Celso Marranzini y monseñor Víctor Masalles, obispo auxiliar de la Iglesia Católica, acompañaron a las comisiones que fueron escuchadas por las comisiones de Educación, Niñez, Adolescencia y Familia, así como la de Asuntos de Género de la cámara baja La mesa de discusión fue conducida por la presidenta de la Comisión de Educación, Josefa Castillo.
El obispo Masalles, quien definió como preocupante a nivel moral y religioso, el contenido metodológico y práctico que presenta el libro, el cual dijo ofende la tradición del camino cristiano en el país.
Señaló que ese compendio invita y motiva a los niños y jóvenes a incursionar a temprana edad en la vida sexual, generando esto consecuencias desastrosas para el sostenimiento de la familia, y por ende de la sociedad. “Estoy totalmente en desacuerdo en que el libro sea un manual que sirva de base para la educación de nuestros jóvenes, es preocupante que se presente como un texto de base para orientar a nuestros adolescentes con respecto a lo que es la educación sexual, tarea que le corresponde en primera instancia a los padres”, dijo.
Mientras Marranzini, expresidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), dijo que detrás de esta promoción se esconde un negocio maligno y llamó a los empresarios a impedirlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario