Los países de la OTAN reforzaron este miércoles su apoyo a
Ucrania con el envío de aviones F-16, baterías de defensa antiaérea.
"Rusia sigue siendo la amenaza más importante y directa a la seguridad de
los aliados".
Los países de la OTAN reforzaron este miércoles su apoyo a
Ucrania con el envío de aviones F-16, baterías de defensa antiaérea y
reconociendo que está en un "camino irreversible" para ser miembro de
la Alianza Atlántica, durante una cumbre histórica en Washington.
"Rusia sigue siendo la amenaza más importante y directa
a la seguridad de los aliados", se lee en el comunicado final.
En esta cumbre "tomamos nuevas medidas para fortalecer
nuestra disuasión y defensa, reforzar nuestro apoyo a largo plazo a Ucrania
para que pueda ganar" en la guerra contra Rusia, añade el texto.
Pero los líderes están preocupados por la posición de China
que "se ha convertido en un facilitador decisivo de la guerra de Rusia
contra Ucrania a través de su llamada asociación 'sin límites' y su apoyo a
gran escala a la base industrial de defensa de Rusia", acusan.
Antes de la apertura oficial de la cumbre, varios países de
la OTAN ya anunciaron que han comenzado a enviar aviones de combate F-16 a
Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que se
encuentra en la capital estadounidense, afirmó que esas aeronaves acercan al
país a "una paz justa y duradera".
"CAMINO IRREVERSIBLE"
Los F-16, procedentes de Dinamarca y Países Bajos,
"volarán en el cielo ucraniano este verano" boreal, declaró el jefe
de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
La Casa Blanca, por su parte, precisó que Bélgica y Noruega
han prometido proporcionar más aparatos.
Ucrania quisiera recibir una invitación formal para unirse a
la OTAN, pero aún tendrá que esperar ante la oposición de varios países,
incluido Estados Unidos.
Tendrá que conformarse con el reconocimiento de que se halla
en un "camino irreversible" hacia la adhesión a la OTAN, señala la
declaración.
Según el canciller alemán, Olaf Scholz, las decisiones
tomadas por la OTAN "ofrecen a Ucrania la claridad que necesita".
Después de haber celebrado a bombo y platillo el martes el
75º aniversario de la alianza militar occidental, los líderes se reunieron en
el Consejo del Atlántico Norte.
El presidente estadounidense, Joe Biden, confirmó el martes
que los aliados proporcionarán a Ucrania un total de cinco sistemas de defensa
aérea, incluidas cuatro baterías de tipo Patriot, misiles tierra-aire
especialmente eficaces para interceptar proyectiles balísticos rusos.
Alemania, Países Bajos, Rumanía e Italia también
contribuirán.
Rusia ha intensificado recientemente sus ataques con misiles
contra Ucrania, matando a 43 personas y devastando el hospital infantil más
grande del país en Kiev esta semana.
Los misiles rusos también han destruido la mitad de la
capacidad energética del país.
Más de dos años después de la invasión rusa de Ucrania, los
aliados también se comprometerán a desarrollar su industria de defensa, informó
el miércoles el secretario general saliente de la OTAN, Jens Stoltenberg.
"Este nuevo compromiso envía un mensaje inequívoco al
mundo", subrayó Biden, satisfecho con que 23 países de los 32 países que
forman la alianza vayan a destinar en adelante el 2% de su Producto Interior
Bruto al gasto militar.
Los líderes también decidieron que su ayuda militar a
Ucrania será como mínimo de 40.000 millones de euros (unos 43,000 millones de
dólares) "en el próximo año".
LA SOMBRA DE TRUMP
La cumbre de Washington se celebra en un clima de
incertidumbre política en Estados Unidos, donde Biden trata a duras penas de
sofocar una rebelión de congresistas demócratas que le piden que abandone la
carrera por un segundo mandato contra Trump, tras su desastroso debate contra
el republicano.
Sobre la cumbre se cierne la sombra del expresidente Trump,
cuyas declaraciones sobre la OTAN parecen debilitar el principio de asistencia
mutua previsto en el artículo 5 del Tratado.
"Espero que, cualquiera que sea el resultado de las
elecciones, Estados Unidos siga siendo un aliado fuerte y leal de la
OTAN", declaró el miércoles Stoltenberg.
El presidente finlandés, Alexander Stubb, reconoció, sin
embargo, que la polarización en Estados Unidos es "muy tóxica".
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, que ostenta la
presidencia rotativa de la UE, también asiste a esta cumbre tras sus polémicos
viajes a Moscú y Pekín.
El presidente ucraniano se reunirá con congresistas antes de
participar en un Consejo OTAN-Ucrania el jueves, último día de la cumbre.
Para Biden será una jornada crucial, debido a que todas las
miradas se centrarán en la rueda de prensa que tiene prevista. No solo se
escrutará lo que dice sino cómo lo dice.